Games Workshop sacó a finales de los años noventa uno de los juegos de tablero con más renombre del mundillo, llamado Mordheim: City of the Damned. Y así es como también se le llama al juego que hoy tenemos la oportunidad de ofreceros gracias al trabajo del estudio independiente Rogue Factor. Un juego que pasa del tablero al ordenador calcado, tal y como lo fue en sus tiempos, por lo que principalmente está pensado para quienes en su día lo jugaron y que a día de hoy lo pueden disfrutar un público más joven pero sabiendo a lo que se enfrenta.
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ANÁLISIS |
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. VERSIÓN DISPONIBLE PC VERSIÓN ANALIZADA PC DESARROLLADOR ROGUE FACTOR DISTRIBUIDOR FOCUS HOME INTERACTIVE . |
. . VALORACIÓN 8 |
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httpv://youtu.be/-o1H-qXAnO8 |
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Podemos elegir una de las cuatro bandas que nos ofrece este Mordheim: City of the Damned. No hay más que pelearse con el bando enemigo para conseguir esos deseados Fragmentos de Brujas que hay repartidos por la ruín y oscura ciudad de Mordheim.
Mordheim: City of the Damned es un juego rol táctico por turnos muy pasados, de transcurso lento y del que debemos tener una paciencia más que
Agradecemos desde lo más profundo de nuestro corazón gamer que no nos soltaran por Moderheim y que fuera lo que el destino quiera. Y eso no ocurre porque afortunadamente contamos con un tutorial para empezar que posiblemente enseñe más de lo que debe, pero siendo este dato un punto a su favor. Es un tutorial que a decir verdad, se come al jugador, lo llena de información y lo satura. Es muy práctico, menos mal, y es progresivo, pero no haber incluido esto hubiera provocado el caos dentro del juego virtual.
Matar a los enemigos no es la base del juego. Es más, es que no suele ser ni el objetivo del juego, aunque obviamente, es algo prácticamente que estamos obligados a hacer. Cada escenario, debemos (estamos también obligados) a peinarlo de pe a pa, sin dejar prácticamente nada por hacer ni ningún objeto por recoger, ya que esto es lo que nos hará verdaderamente fuertes en el juego. Eso sí, debemos tener en cuenta que este tipo de cosas no es coser y cantar. Primero, por la amplitud de los escenarios y por que no siempre sabremos bien coger el mejor camino, pese a contar con un mapa que ayuda mucho. Segundo, porque a más tiempo estemos en un mapa, más riesgo tendremos de luchar contra los enemigos, por lo que como también imaginaréis, a más luchas más opciones de ver caer a nuestros aliados. Esto no sería un problema si los aliados tuvieran la opción de volver tarde o temprano al campo de batalla, pero perder a un soldado implica perderlo para siempre, es decir, nunca volverá.
¿Es mejor entonces ir al grano? No. De manera rotunda… No. Pensar, a más no poder, es lo que tenemos que hacer. De hecho, pensar viendo lo que tenemos y estudiando las posibilidades. Nos equivocaremos en muchas, está claro, y en otras tanto arriesgaremos (y como siempre, saldrá bien o saldrá mal) pero es que no hay otra manera. ¿Qué tipo de habilidades y armas tiene nuestro personaje? ¿Cuántas tropas manejamos? Todo esto y más es lo que nos debemos ir preguntando en cada movimiento e incluso en cada movimiento de nuestro enemigo.
La generación de los mapas viene a ser aleatoria y es por ello por lo que se puede invertir más horas de las que ya de por sí el propio juego incluye.
La personalización de los soldados es exclusiva para cada jugador, ya que al igual que ocurría con las figuras del mismo universo, aquí podemos dotar al personaje en cuestión de los atributos y diseños que deseemos.
No solemos mencionar juegos ajenos en los análisis pero nos vemos obligados a hacerlo en este caso. Hablar de un juego difícil, es hablar del reciente Bloodborne o de otra saca de los mismos creadores, Dark Souls. Pues bien, Mordheim: City of the Damned se convierte desde ya en otra de las referencias de los juegos más harcore. Es un juego difícil, complejo, que requiere horas y que aunque dominemos y hagamos buenos movimientos, siempre hay que permanecer en alerta.
Mordheim cuenta con batallas multijugador para poder seguir aumentando las horas de juego. No es la base del juego, y se podría haber profundizado más, pero lo cierto es que no es un juego que tenga como objetivo primordial entretener a sus jugadores de manera online. Además de ello, destacamos que la IA de los enemigos cuenta con un gran número de horas de trabajo dado el buen resultado y flujo de las batallas.
No estamos con un apartado técnico que vengamos a tomar de referencia el día de mañana, pero lo que tenemos sí es verdad que está a la altura de un gran apartado técnico. Hablando primero del gráfico, consideramos el que está por encima de los dos, y que aunque los movimientos de los personajes sí pueden ser en ciertas ocasiones y muy contadas algo robóticos, el diseño de escenarios y de los personajes, tanto amigos como enemigos como los enemigos de peso, cuentan con una recreación digna de admirar y que gustará sobre todo a los amantes del mundo de Warhammer.
En lo sonoro, cumple con la estética del juego y nos envuelve de manera notable en los escenarios, y aunque consideramos que cada una de las melodías que suenan, le falta un poco por pulir. Nada que entorpezca o molesta la jugabilidad del mismo.
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NUESTRA OPINIÓN FINAL – |
| Mordheim: City of the Damned es un juego pensado para los fans. No cabe duda. Pero si quieres introducirte en el mundo que abarca, quieres probar el juego, o simplemente quieres probar un buen juego del género, esta entrega también te ofrece cubrir y de manera notoria tus expectativas. No es el mejor juego en nada en concreto, pero la idea de Rogue Factor, de pasar el tablero de mesa al ordenador, es un objetivo cumplido de manera sobresaliente. Nos ha gustado mucho este Mordheim: City of the Damned. |
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