Uno de los géneros más de moda en la escena independiente de desarrollo, es sin lugar a duda el roguelike. Y es que no paran de aparecer verdaderos juegazos bajo un concepto que parece no tener fin, y que tampoco tengo interés de que termine. Y más cuando me encuentro con juegos tan interesantes como este que nos presenta Upstream Arcade, y que nos lleva a un mortal y particular oeste, donde la muerte, la luz, y un universo bastante especial, ha hecho que fije mis ojos en él, que lo disfrute, y que os traiga esta opinión sobre él.

Fecha de lanzamiento: 18 JUNIO 2020
Desarrolladora: Upstream Arcade
Distribuidora: Raw Fury
Plataformas: PS4- XONE- PC– SWITCH
Versión Analizada: PC
Idiomas Voces/Texto: INGLÉS/ESPAÑOL
Número de jugadores: 1

NOTA: 7

httpv://www.youtube.com/watch?v=77ZOogxRr7Q

Entrando ya en la jugabilidad, os tengo que contar, que nos encontramos ante un juego donde la muerte es algo constante, donde los escenarios laberinticos es su sello, y donde la perspectiva, la luz, y la movilidad, serán de obligatorio control por parte del jugador. Y es que curiosos que a primera vista este West of Dead parece un juego que puede ser muy frenético, pero una vez dentro te terminas dando cuenta de que el planteamiento estratégico de cada sala, el saber aprovechar las coberturas, la iluminación, e incluso el rango de disparos de las propias armas y habilidades, será algo esencial de medir y sopesar. Así que tomároslo con mucha calma, ya que ir a lo loco termina costando caro, y más cuando es un tipo de juego donde avanzar lo más mínimo en una partida nos puede suponer un avance tan importante dentro del juego en sí.

Como en todo buen roguelike me he encontrado con esos tintes roleros, y ese toque de aleatoriedad en las armas, ítems, recursos y habilidades. Y es que es un punto muy interesante como se ha creado un sistema de mejora de las propias armas a medida que avanzamos en cada partida, a lo que le acompaña la adquisición de items extras que modifica nuestra defensa, ataque, movilidad, etc. Pero sin dudarlo, lo más interesante son las posibilidades de mejora de nuestro personaje, las cuales van hacia dos caminos; las que solo nos duran hasta la muerte, las cuales desbloqueamos cada vez que lleguemos a un altar. Y por otro lado las permanentes, para la cual necesitaremos una serie de calaveras que los enemigos dejarán caer, y que podremos gastar en el desbloqueo de estas, las cuales ya si son permanentes, dentro de la aleatoriedad de todo lo que nos rodea.

Hablando de lo que nos rodea. Me ha sorprendido el buen diseño de escenarios de generación aleatoria también. Eso sí con dos defectos bastante llamativos como son; que pese al pequeño mapa que poseemos, lo parecido de cada una de las salas y pasillos harán que nos perdamos de vez en cuando. Y en otro punto los enemigos, los cuales no son especialmente listos en su forma de actuar.

Eso sí, me ha gustado la implementación de varios puntos que hacen de este West of Dead algo más original de lo habitual. Estos son; su sistema de coberturas que se podrá romper, y que es de uso obligatorio para un buen planteamiento de cada zona. Por otro lado, el buen uso de la iluminación, destacando unas lámparas que esconderán a los enemigos en sus sombras, y que dan otro punto más importante a la estrategia. Y, por último, el sistema de disparo, en el que además de una importancia muy grande a la recarga, potencia del arma y rango de disparo, se le ha puesto especial atención a un sistema de apuntado bastante guiado que no es todo lo fino que esperaba.

Por cierto, el control en algunos momentos es bastante tosco, y movimientos como la esquiva o la falta de acierto en ciertos disparos o en los ataques cuerpo a cuerpo, me han llegado a desesperar un poco.

Visualmente es un juego muy particular. Y es que tiene una estética muy parecida a un comic. Donde se mezclan de forma perfecta unos colores muy básicos entre los que destaca los marrones, los negros y los rojos, a los que se le une unos diseño bastante minimalistas y cuadriculados. Una delicia visual que juega mucho con la luz y la oscuridad.

Por lo que a la parte sonora se refiere, os tengo que destacar los buenos efectos sonoros, unidos a un buen trabajo en lo que a implementación y coordinación musical respecto a la acción se refiere. Que termina de engalanarse con una notable narración, en la que nos va dejando muy claro el universo donde nos movemos, y nuestros propios pensamientos. Y todo en nuestro idioma, cosa que agradecemos.

En conclusión, deciros que me lo he pasado muy bien con este West of Dead. Y es que el género del roguelike nunca para de sorprenderte con nuevas y originales ideas que encajan prácticamente con todo lo que se le quiera inyectar este concepto.

Un juego muy particular en lo visual, con una jugabilidad bastante pulida, muchas horas de juego, un universo bastante curioso, y esa clásica intensidad, aquí un poco menos frenética, que este tipo de juego nos da, y nos obliga a querer una y otra partida, aunque nuestro destino sea la muerte.

NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS

Código digital proporcionado por Raw Fury

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