Moteros y zombis mejor que nunca, pero igual que siempre
Desde su lanzamiento original allá por 2019, y que por esta web pudimos analizar, Days Gone ha ocupado un lugar peculiar en el catálogo de PlayStation. Y es que un título que era tremendamente ambicioso y querido, no terminó de entrarnos con toda esa fuerza que hubiésemos deseado.
Por ello, y tras reposar la idea durante muchos años, me he podido acercar a Days Gone Remastered. El cual ha llegado para ofrecer una versión optimizada y más completa de aquella propuesta de mundo abierto llena de zombis y moteros. Una remasterización que se plasma ajustando aspectos técnicos y añadiendo opciones de juego adicionales, que durante estos días me ha vuelto a hacer recorrer sus carreteras desiertas, para redescubrir una experiencia que, aunque más pulida, sigue arrastrando tanto sus virtudes como sus viejos defectos.
FECHA LANZAMIENTO |
24 ABRIL 2025 |
DESARROLLADORA |
Bend Studios |
DISTRIBUIDORA |
SONY |
PLATAFORMAS |
PC – PS5 |
VESIÓN ANALIZADA |
PS5 |
VALORACIÓN |
7 |

¿De que va todo esto?
Poco os quiero introducir del juego base, ya que podéis leerlo en el análisis que hicimos en su día de la versión original. Pero para el que no le apetezca os cuento que la esencia jugable de Days Gone Remastered se ha mantenido fiel a su identidad original, es decir, se trata de un aventura de supervivencia de mundo abierto ambientado que nos lleva al Noroeste del Pacífico. Donde el azote de una pandemia ha transformado a gran parte de la humanidad en básicamente zombis, y con ello todo lo que ello puede conllevar para la vida de los no infectados. Y es aquí donde tomamos el papel de Deacon St. John, un motero superviviente cuya búsqueda de redención personal, y casi el propio sentido de su vida en medio del este caos, vertebra la narrativa principal de esta historia.

Más allá de ello, el juego nos lleva a un mundo el cual explorar, donde se combina con combate a distancia, cuerpo a cuerpo y sigilo, apoyadose en un sistema de progresión dividido en tres árboles de habilidades; supervivencia, combate cuerpo a cuerpo y armas de fuego, se toma como base principal para dar vida y avanzar en esta dura aventura. Donde además, la recolección de recursos para fabricar objetos y el mantenimiento de nuestra amada motocicleta nos va a meter en un buen número de situaciones en más de una treintena de horas que dura esta experiencia.
Como ya os digo, este se estructura bajo un mundo abierto bien planteado, que ofrece misiones principales, secundarias y eventos aleatorios, donde las diferentes zonas que visitar, y esos bien trabajados ciclos dinámicos de día y noche que altera tanto la dificultad como la estrategia frente a enemigos, constituyen y conllevan una aventura que es fácil que entre en nuestras vidas, pero que por desgracia mantiene defectos que lastraron tanto la experiencia en su día. Donde la IA enemiga se mantiene tan previsible, y como ya pasara y fuera tan criticado, vuelve a llevarnos a los limitados desafíos y poco variadas misiones.

Los detalles más y menos interesantes
Sin duda, lo que más me ha gustado de este Days Gone Remastered ha sido el propio mundo, y lo bien que se ve ahora con las diferentes mejoras gráficas. Y es que la recreación de los paisajes más salvajes norteamericanos y, esa sensación de abandono y desolación, resulta muy inmersiva y agobiante. Y es que con el aumento de la densidad de la vegetación, el refinamiento de la iluminación dinámica, y los bien logrados efectos atmosféricos le han dado mucha más vida y credibilidad a todo lo que nos rodea.

Cosa que va unida también a la mejora técnicas dentro de la parte de los tiempos de carga. Cosa que los hace ahora casi instantáneos. Creando una sensación mucho más continua y ágil a nuestra motera exploración. Por cierto, una conducción que se ve muy realzada por la respuesta háptica del DualSense, ya que se ha reforzado al tacto del terreno y el peso de los desplazamientos.

Tampoco puedo dejar de nombrar los nuevos modos de juego, como el Asalto de Horda y el Modo Muerte Permanente, los cuales añaden mucho contenido y nuevos desafíos a la experiencia. Destacando ese modo Asfalto donde esos enfrentamientos multitudinarios contra freakers, son muy divertidos y altamente rejugable.

Por desgracia, por el lado de las imperfecciones de este Days Gone Remastered, tengo que decir que pese a haber sido actualizado en su presentación técnica, el resto del juego, es decir, a nivel narrativo o en la propia estructura jugable ha envejecido bastante regular. Una historia principal, que más allá de ciertos momentos, es bastante floja, y una estructura de misiones demasiado repetitiva que termina por ser cansina. Y más para jugadores que ya disfrutaron del original, ya que no se ha añadido contenido narrativo nuevo ni cambios estructurales de peso, que inviten a rejugar está aventura.

En la parte técnica, pese a sus mejoras visuales, he echado de menos mejoras en las animaciones faciales, en la distancia de dibujado, o en la aparición de objetos y vegetación. Una pena que lo hace envejecer bastante mal.

Conclusiones
En definitiva, Days Gone Remastered ha sido una agradable, aunque no muy llamativa, oportunidad de reencontrarnos con un título que merece mucho más la pena de lo que parece. Pero que pese a el buen trabajo que ha realizado Bend Studio a la hora de optimizar el rendimiento, mejorar la detalles visuales, no creo que sea suficiente como para sentir que estamos jugando a algo muy diferente, cosa que no es un problema ya que es un buen juego, pero siempre se busca más en este tipo de remasterizaciones.
Una experiencia especialmente diseñada para quienes no jugaron la versión original. Lo que hace de esta remasterización la mejor forma de adentrarse en un universo postapocalíptico bastante particular y único. Pero poco agradecida y con pocas motivaciones para aquellos que ya lo hicieron su día. Y que más allá de esas mejoras técnicas, y algunos detalles jugables, se van a topar con todo lo bueno y lo malo de este Days Gone.
