La mejor obra de nuestro amigo rosa
No hay nada más lleno de amor que sentarte ante nuestra consola de Nintendo y ver a nuestra pequeña bola rosa Kirby sonreírte, como si nada malo pudiera suceder. Y es que tras tantos años el personaje sigue tan lleno de carisma y cuquerio. Eso sí, esta vez, la adorable bola rosa ha dado un salto inmenso dentro de su concepción, ha cruzado a otra dimensión.
Kirby y la tierra olvidada es un soplo de aire fresco para la saga, y ahora, con la versión mejorada que nos acerca al mundo astral en Nintendo Switch 2, la experiencia se siente mejor que nunca, y no lleva a redescubrir un parque de atracciones que ya conocíamos de la edición base, pero con nuevas y maravillosas atracciones. Todo ello termina haciendo de esta versión, lo mejor que le ha pasado a Kirby en muchos años, y en sus mejoras y añadidos voy a basar este análisis.

¿De que va todo esto?
Entrando ya en esta Tierra Olvidada. Os tengo que decir que la esencia sigue siendo la misma de toda la historia de la franquicia, un juego de plataformas donde Kirby absorbe a sus enemigos para copiar sus poderes y resolver niveles llenos de secretos, combates y puzles bastante sencillitos.

Esto nos acerca a una gran novedad, más allá de su paso a la tridimensionalidad, las transmorfosis, habilidades especiales que permiten al personaje transformarse en objetos como un coche, una máquina expendedora o incluso un cartel deslizante. Y consigue hacer de su aventura por estos mundos, una auténtica delicia para los amantes del personaje, y del género a nivel general.
Por cierto, en esta edición, además de la mejora técnica, se han añadido una docena de niveles nuevos, modificados por un meteorito que altera los escenarios originales y aporta un aire más desafiante y sorprendente a una aventura que es puro amor por el personaje y su universo.

Los detalles más y menos interesantes
Entrando en más detalles, lo primero que destaca en esta edición, contando que ya el juego era toda una belleza artística, es lo impresionante que se ve en la Nintendo Switch 2. Y es que los escenarios, que ya eran una hermosura, ahora son más nítidos y fluidos, ofreciendo un rendimiento muy sólido que hace que la experiencia sea aún más placentera y disfrutable. Por lo que explorar ruinas cubiertas de vegetación o parques de atracciones abandonados, es ahora ya un portento artístico y visual por donde deambular con nuestro rosado amigo.

Pero sin duda, lo que realmente brilla en esta entrega especial son las nuevas fases. Ya que no se limitan a reciclar lo que ya conocemos, si has jugado al juego base, sino que transforman niveles que ya son familiares, hasta hacerlos casi irreconocibles, con rutas nuevas, secciones más verticales y enemigos más desafiantes. Además, para disfrute de todos se han incluido nuevas transformaciones, como la de engranaje, ideal para escalar paredes, o la de muelle, que abre un mundo de posibilidades divertidas para el plataformeo. Sin duda, no todas son igual de divertidas e importantes, pero cuando funcionan, lo hacen de maravilla y aportan esa frescura y amor por las plataformas que siempre ha llevado por bandera está franquicia.

Volviendo a la parte técnica. Otro aspecto destacado es la música. Este nos alegra la vida con una banda sonora original con mucha personalidad y que se nos queda grabada. Eso sí, en el contenido especial las composiciones adoptan un tono más misterioso y cósmico, en sintonía con el nuevo Mundo Astral. Cosa que le da una personalidad única y convierte algunos momentos en experiencias que nos dejan embobados ante la pantalla.

Tampoco quiero dejar de hablar de la parte narrativa. Y aunque la historia sigue siendo sencilla en base, se ha intentado rellenar con la de este nuevo mundo de estrellas, donde un meteorito, una isla volcánica, recoger astralines para sellar un mal mayor nos acerca a un un nuevo contenido y a un curioso planteamiento que funciona como perfecta excusa para seguir disfrutando de este divertida experiencia.
Por cierto una experiencia donde hay que valorar esa exquisita rejugabilidad que tiene más que garantizada. Y es que conseguir todos los coleccionables y completar al 100% las fases no es tarea fácil, lo que añade horas de entretenimiento extra, más allá de ese contenido especial de esta edición.

Eso sí, no se han corregido ciertos defectos que me hubiera gustado que se hubiesen tenido en cuenta. Por ejemplo aquí entra el modo cooperativo, el cual sigue enfrentando el mismo problema, el segundo jugador solo puede controlar a Waddle Dee, el cual tiene habilidades bastante limitadas y no puede acceder a las transmorfosis. Creándose con ello una experiencia bastante desigual si juegas con un amigo.

Además, aunque los doce nuevos niveles están bien diseñados, no todos tienen la misma consistencia. Algunos son realmente buenos, con giros realmente sorprendentes en la jugabilidad, otros se sienten un poco cortos o menos llamativos, aunque mantienen el nivel de diversión que abarca todo el juego. Por cierto, una aventura que se alarga unas tres horas más, gracias a esta expansión, cosa que es cierto que para los jugadores que disfrutamos de la aventura en Switch se nos puede quedar algo corta.

Por último, aunque la dificultad ha aumentado ligeramente, aunque está claro que sigue sin ser un gran desafío para quienes buscan un juego de plataformas exigente. Pero es de entender que Kirby nunca ha sido sinónimo de sufrimiento y reto, por lo que tampoco vamos buscando esto en esta aventura.

Conclusiones
En conclusión, deciros que Kirby y la tierra olvidada + El mundo astral es, sin duda, la mejor manera de disfrutar de la aventura de nuestro amigo rosa, especialmente si nunca jugaste al original, cosa que hace que esta edición es absolutamente recomendable, incluso imprescidible para los amantes del género. Y es que esta llega bajo una bases llenas de colorido, variada de acciones y situaciones, y con un diseño realmente brillante. Eso sí, si ya lo jugaste en su momento, la expansión ofrece suficiente contenido y frescura como para justificar volver a ella, aunque tambien es cierto que no es un paquete amplísimo en contenido.
En definitiva, Kirby ha logrado lo que parecía un sueño, el dar el salto a la tercera dimensión sin perder su esencia, y ahora incluso enriquecerla con nuevas ideas que funcionan sorprendentemente bien. Sin duda una de esas experiencias made in Nintendo que te deja con una sonrisa de oreja a oreja de principio a fin.
