Análisis de Anno 117: Pax Romana

El retorno de lo clásico

Como ya os digo, y para quien no lo sepa, Anno 117 es un juego de estrategia, gestión y construcción en tiempo real donde asumimos el papel de gobernador romano. Nuestra misión es construir ciudades, expandir provincias y mantener un equilibrio constante entre la economía, la diplomacia y, si es necesario, el poder militar.

Esto nos acerca a una ambientación situada en la Pax Romana, un periodo relativamente estable del Imperio, lo que permite que la experiencia se centre más en el desarrollo y la gestión que en el conflicto directo. Por lo que las dinámicas principales serán; construir, optimizar y tomar decisiones que definan la identidad cultural y el futuro de cada región.

Entrando en detalles, tengo que destacar en primer lugar lo bueno que me ha parecido el ritmo y evolución de las partidas. Un juego, que pese a sus bases clásicas, te introduce a nuevas mecánicas de manera gradual, que nos permite avanzar sin sentirte agobiado y de manera muy orgánica. La gestión de las clases sociales sigue siendo una de las mecánicas más interesantes, haciendo que cuanto más felices estén tus ciudadanos, más progresará todo nuestro imperio. Pero al mismo tiempo, necesitaremos mantener un número suficiente de clases bajas para no ahogar tu producción. Un equilibrio, que parece sencillo en teoría, pero que genera situaciones tensas, muy interesantes, y ante todo, muy entretenidas.

Otro aspecto que quiero destacar con fuerza es la ambientación. Y es que este nos acerca a una ciudades preciosas y llenas de vida. Donde podremos ver desde familias paseando por las calles, hasta mercados y coliseos que aportan carácter al lugar. Sin duda Anno 117 es de esos juegos en los que te quedas un buen rato mirando el mapa sin hacer nada, simplemente disfrutando de cómo se mueve y evoluciona. Todo ello acompañado de una perfecta ambientación sonora y una banda sonora que acompaña con elegancia sin robar protagonismo.

Por lo que respecta a la campaña, la cual nos puede dar más de una veintena de horas, sabe llevarnos de la mano como introducción. Eso sí, plantea decisiones que no terminan de encajarme dentro de la evolución de la narrativa, siendo especialmente intrascendente el elegir entre Marcus o Marcia como protagonistas, ya que no cambia mucho la experiencia, y algunas decisiones parecen más decorativas que realmente determinantes. Por otro lado, se agradece el modo Sandbox, aunque también tengo que decir que especialmente más regiones o civilizaciones que aporten variedad a largo plazo no le hubiera venido mal.

Por último, el combate no me termina de convencerme. Y aunque funciona, tampoco se vuelve apetecible. Sintiéndose más como un trámite que como un sistema profundo, ya que a veces interrumpe el ritmo de la gestión, que es donde el juego realmente brilla.

Para terminar, decir claramente que Anno 117: Pax Romana es, en esencia, un tributo y un retorno a lo mejor de la saga sin ningún tipo de complicación ni riego alguno. Por lo que; construir, optimizar y observar cómo tus ciudades florecen, volverá a ser el pilar de la entrega. Eso sí, me parece una excelente puerta de entrada para aquellos que nunca se han atrevido con este género, ya que la experiencia está muy bien medida, sabe como evolucionar, y no requiere demasiados conocimientos dentro del género, y que conste que esto no quita profundidad a la experiencia para los mas acérrimos a la saga y que desean perderse durante horas gestionando recursos y edificando.

Sin duda, el juego logra algo que pocos en su categoría consiguen; ser accesible, atractivo, desafiante y, sobre todo, increíblemente divertido. Así que si te encantan los juegos de construcción, si te fascina la historia de Roma, o si simplemente buscas un título que te permita sumergirte y disfrutar sin estrés, Anno 117 es una elección segura que te mantendrá horas y horas reorganizando, tomando decisiones y disfrutando de cada pequeño avance de tu imperio.