Análisis de Rustic Defense

Una defensiva experiencia llena de curiosidades

Como ya os he contado en la introducción,Rustic Defense es un tower defense hexagonal que incorpora elementos roguelike y mapas generados de manera procedural. Así que, colocar torres, investigar nuevas variantes, desbloquear héroes y enfrentarnos a oleadas de enemigos que provienen de cuatro biomas diferentes, serán esas bases jugables que nos tengan enganchados durante una buena cantidad de horas.

Todo ello bajo la concepción de partidas que duran casi medio centenar de oleadas, las cuales al finalizar nos permiten obtener experiencia que podremos invertir en un árbol de habilidades permanente que potenciará nuestra próxima partida. Una idea sencilla, que nos pone en toma de decisiones como; eligir tu camino, expandir el mapa, o construir defensas lo suficientemente sólidas para resistir jefes cada vez más potentes.

Sin duda lo mejor de Rustic Defense es que su jugabilidad y su concepción base se pone en marcha de inmediato. Y es que desde el inicio entendemos cosas tan básicas como que las torretas disparan por sí solas, cosa que nos permite concentrarnos en decidir qué construir, cuándo mejorar y cómo evitar dejar un camino directo hacia el núcleo.

Todo ello envuelto en bajo un sistema de armas que es sorprendentemente diverso para un proyecto tan compacto, encontrando una quincena de torres organizadas en categorías, a las que se le unen versiones avanzadas con daño elemental y habilidades especiales, además de sinergias que transforman por completo la manera en que enfrentas una oleada. Tengo que destacar la opción de definir prioridades de ataque añade una capa táctica muy bien planteada, siendo especialmente util contra jefes.

Por lo que se refiere a la parte de los héroes. Deciros que estos aportan otra dimensión muy interesante. Y aunque no tienen historias complejas, son esenciales en el juego cuando las oleadas se vuelven más intensas. Aquí entran las cartas, tanto normales como épicas, las cuales funcionan como un sistema ligero de construcción de mazos que introduce cosas como; nuevas armas, aumentos masivos de daños, o incluso efectos elementales permanentes que pueden salvarnos toda una partida.

Eso sí, por otro lado entre los puntos más débiles están la variedad del entornos, y es que pese a que los mapas se generan aleatoriamente, la estética básica siempre es la misma. Todo esto hace que después de muchas horas, esa repetición visual puede volverse un poco pesada. También hay una fuerte dependencia del azar, y es que cartas, minas de oro, armas especiales… todas pueden alinearse para una partida maravillosa o dejarnos sin opciones en a los segundos de empezar.

En resumen, Rustic Defense es uno de esos juegos que saben captar a la perfección el género de tower defense, pero con un toque único que lo hace muy original y adaptable a estos tiempos que corren. Y es que su combinación de progresión continua, la toma de decisiones rápidas, y las largas oleadas de enemigos crea un ritmo muy adictivo, que se vuelve un autentico come horas.

Es cierto, que hubiese sido genial contar con más mapas y escenarios alternativos, pero lo que ofrece ya proporciona varias decenas de horas de diversión sólida. Así que si sois fans de los tower defense donde colocas tus armas, plantear estrategias, y disfrutas viendo cómo todo se destruye a tu ritmo, este es un juego perfecto para vosotros.