La esencia del esquí extremo
Megagon Industries ha regresado con Lonely Mountains: Snow Riders, un sucesor directo de su aclamado Lonely Mountains: Downhill. Esta vez cambiando las bicicletas por esquís y el barro por nieve, pero todo ello con el mismo objetivo, descender montañas de lo más escarpadas a toda velocidad, entre momentos de precisión y otros llenos de estilo, mientras luchamos contra las adversidades naturales, nuestros pulso y nuestra capacidad de jugarnos la vida. Y que en esta líneas os voy a dejar más claro hasta donde llega esta nueva entrega de la saga que tantas horas de vicio nos hizo pasar con una concepción tan básicamente perfecta.
FECHA LANZAMIENTO |
21 ENERO 2025 |
DESARROLLADORA |
Megagon Industries |
DISTRIBUIDORA |
Megagon Industries |
PLATAFORMAS |
PC – XBOX ONE – XBOX SX |
VESIÓN ANALIZADA |
PC |
VALORACIÓN |
8’5 |

¿De que va todo esto?
No me quiero enrollar demasiados con parafernalias, y al igual que el propio juego, quiero desde el primer momento dejarme llevar por Snow Riders. Y es que este te sumerge en el mundo gélido, naturalista y solitario, bajo un diseño artístico low-poly que da mucha vida a paisajes cubiertos de nieve llenos de una calmada belleza. Habiendo conseguido, a pesar de sus sencillos y casi monocrómicos entornos, una diversidad de biomas llenos de sutiles detalles, donde desde los vastos campos nevados hasta sinuosos caminos helados nos absorben y nos hacen sentir parte de la naturaleza. Planteando ante nosotros una serie de pistas que ofrecen un diseño maravilloso, mientras que la nieve se deforma al paso de los esquís, que añade un nivel de inmersión realmente genial.

Todo ello, unido a una maravillosa atmósfera auditiva. Donde en lugar de una banda sonora tradicional, el juego opta por el sonido del viento y el deslizar de los esquís sobre la nieve. Consiguiendo reforzar esa sensación de aislamiento, además de invitarnos a centrar nuestro enfoque en la experiencia de descenso.
Los detalles más y menos interesantes
Entrando más de lleno en la jugabilidad, este toma sin duda el corazón de Snow Riders. Y es que los controles y las físicas beben directamente del original. Eso sí, nos lleva inicialmente a entrenar y adquirir algo de práctica, hasta que nos sintamos más precisos, y se nos permita maniobrar con fluidez por las desafiantes pistas. Unas pistas que nos llevan a esquivar obstáculos, tomar giros cerrados o realizar saltos de lo más atrevidos que se sienten increíblemente satisfactorios, especialmente cuando logras encadenar una carrera limpia.

Como novedad, deciros que se ha añadido un sistema de movimientos especiales. Y es que giros, volteretas y maniobras de lo más arriesgadas lucen espectaculares, además de convertirse en un componente importante en el modo multijugador. Y es que sin lugar a duda este modo es una de las mayores fortalezas del título. Llevándonos a competir contra otros jugadores en tiempo real, cosa que añade una dosis extra de adrenalina, mientras que por otro lado, el modo cooperativo ofrece una dinámica más relajada y colaborativa, donde los jugadores debemos sumar puntos mediante velocidad y trucos.

El diseño de las pistas también merece un reconocimiento especial. Cada una está cuidadosamente diseñada con múltiples rutas que premian la exploración y la experimentación. Y es que encontrar el camino más rápido, o descubrir atajos es parte del encanto. Volviendo a destacar un sistema de puntos de control asegura que cada intento sea igual de desafiante que el anterior.
A todo esto hay que añadir un buen numero de desbloqueables, complementos, y diseños, que nos motivan a dar vida a nuestro personaje, y hacerlo más nuestro aún.

A pesar de los muchos aciertos y virtudes que tiene, Snow Riders no está exento de defectos. Estos pueden pasar por la falta de un botón para reiniciar al inicio de la pista, siendo un engorro para los jugadores que buscan perfeccionar sus carreras completas. Además, aunque el multijugador es una excelente complemento, me he encontrado con algunos problemas de latencia pueden afectar la experiencia, especialmente en momentos críticos o de alta velocidad.
Como ya os he comentado antes, uno de los punto a destacar es la relativa uniformidad de los entornos. Si bien la nieve está maravillosamente representada, se extraña la diversidad visual que ofrecía Downhill, donde las montañas combinaban colores y texturas más variados. Esto no llega a afectar la jugabilidad, pero puede dar la impresión de cierta repetitividad visual tras varias horas de juego. Cosa que también se sufre por la necesidad de alguna montaña más, ya que se me ha quedado algo corto.

Conclusiones
En definitiva, Lonely Mountains: Snow Riders es una experiencia imprescindible para los amantes de los retos. Siendo una secuela que toma las bases de su predecesor y las adapta al esquí extremo de forma magistral. Aunque no logra superar, y especialmente sorprender, como ya lo hizo Downhill. Eso sí, ofrece una experiencia fresca, desafiante y realmente adictiva, especialmente gracias a su enfoque en el multijugador y el diseño de niveles.
Con su atmósfera única, controles precisos y un diseño visual cautivador, Snow Riders es un título que logra capturar la esencia de los deportes extremos, consiguiendo esa combinación de emoción, técnica y riesgo. Así que, si estáis listos para enfrentarte a la nieve y conquistar las montañas, no lo penséis más, abrocharos los esquís y dejaros llevar.

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