Hoy toca hablar de Okhlos, un juego desarrollado por la compañía independiente Coffee Powered Machine, y distribuido por Devolver Digital. Estamos ante un juego de acción estilo roguelike, en el que iremos recorriendo la antigua Grecia pasando de mapa a mapa eliminando a todos los enemigos que nos encontremos con la ayuda de nuestra furiosa turba de seguidores.

ANÁLISIS

Okhlos cab

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VERSIÓN DISPONIBLE

PC

VERSIÓN ANALIZADA

PC

DESARROLLADOR

COFFE POWERED MACHINE

DISTRIBUIDOR

DEVOLVER DIGITAL

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VALORACIÓN

7

httpv://www.youtube.com/watch?v=7XD3Cw6KGEc

NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS

La historia está contextualizada en una antigua Grecia en la que los dioses del olimpo campan a sus anchas, haciendo lo que les da la gana y molestando a los ciudadanos, hasta que un día un filósofo decide ponerle fin a ese comportamiento, montando una revolución del pueblo contra los dioses.

Dicha historia está contada de forma muy breve, mediante una narración corta al principio del juego y a través de Homero que irá contando los sucesos a medida que vayamos avanzando por las distintas ciudades. A pesar de ser breve, es muy efectiva ya que te sitúa perfectamente en la historia, además de ser un argumento llamativo y original que satisfará a la mayoría, sobre todo a los interesados por la mitología griega y a lo que se le añade una gran dosis de buen humor.

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Como buen juego roguelike, el mayor interés está en la jugabilidad. Mediante un tutorial opcional nos explican los controles, los cuales son muy simples. Podremos esprintar, atacar, y bloquear, pero no lo haremos sólo nosotros, sino también nuestra turba de seguidores. Controlamos a un filósofo que incita la rebelión contra los dioses, y por lo tanto, en cada mapa encontraremos diferentes tipos de habitantes que al pasar a su lado, hará que nos sigan y formen parte de nuestro ejército.

Con el cursor iremos guiando a nuestra turba para que ataquen a nuestros enemigos, y al mismo tiempo tendremos que estar atentos tanto de no morir nosotros, como de que no mueran ellos, ya que si nos quedamos sin turba no podremos hacer nada. Esto hace que a pesar de su simplicidad en los controles, sea realmente frenético y adictivo.

Los lugareños que reclutemos para nuestra furiosa turba tendrán diferentes funciones, existiendo filósofos, soldados, defensores, ciudadanos y esclavos Los filósofos cuentan como vidas extra, ya que si morimos, seguiremos jugando en la piel de otro filósofo; los soldados cuentan como la fuerza ofensiva con mayor poder de ataque; los defensores bloquearán con sus escudos, y los ciudadanos podrán coger objetos para otorgar bonificaciones temporales a nuestra turba. Tristemente los ciudadanos no aportan ninguna bonificación. Tenemos un límite máximo de turba por lo que a veces tendremos que pensar en un balance de fuerzas. Esto le da un toque adicional de estrategia que le viene muy bien.

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Al terminar cada nivel, nos encontraremos un mercader que nos dará la posibilidad de cambiar cinco unidades por un “héroe”, personajes míticos como Edipo o Néstor que otorgará bonificaciones permanentes a nuestra turba siempre que esté vivo, además de venir acompañados de un chiste.

Cada varios niveles, nos encontraremos con un jefe, en este caso serán los dioses del olimpo como Ares o Artemisa, los cuales tienen unas mecánicas bastante marcadas y repetitivas, pero muy rápidas por lo que nos obligará a estar atentos si no queremos perder nuestra turba rápidamente. Como dato muy importante, decir que si morimos, tendremos que empezar desde el principio del juego, por lo que es bastante hardcore. Lo bueno es que dependiendo del progreso que hagamos en la partida, desbloquearemos héroes que podemos seleccionar al comenzar la siguiente partida hasta un máximo de tres, de forma que podemos orientar las características de nuestra turba de una manera diferente en cada partida.

Además del modo historia, podremos desbloquear modos secretos encontrando palabras ocultas a lo largo de los niveles, que cada uno tiene una característica especial, como por ejemplo, pelear con 5 soldados especiales sin poder reclutar ninguno más. Esto le da más variedad al juego que nunca viene mal.

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En el menú principal podremos ver nuestras estadísticas generales, donde veremos reflejado todos los récords que hemos ido alcanzando a lo largo de nuestras partidas, como por ejemplo el total de enemigos eliminados, las unidades de la turba que han muerto, o los ítems usados.

Dentro del aspecto visual, hay que destacar el colorido y la atención a los detalles que tiene, a pesar de ser un juego estilo retro. Dicha estética le hace bien y sabe aprovecharla al máximo, ya que resulta muy agradable a la vista.

En el aspecto sonoro cabe destacar que aunque tiene una banda sonora divertida, que recuerda mucho a la época, es extremadamente repetitiva y acabaremos cansados de ella en poco tiempo.

Hablando del apartado técnico, hay que decir que es un juego que funciona perfectamente a 60 fps en ordenadores de gama con la calidad al máximo, además de no haberse presentado ningún bug, crasheo o freeze. Dentro de los idiomas, podremos elegir entre inglés, español, francés, alemán, italiano, griego, polaco, portugués, chino, coreano y a modo humorístico, el idioma bárbaro que sólo consiste en “bar bar bar”. Además, podremos cambiar todos los controles a nuestro gusto e incluso jugar con mando.

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NUESTRA OPINIÓN FINAL

En resumen, Okhlos es un juego divertido y adictivo que sabrá sacaros unas cuantas horas de entretenimiento y de sonrisas gracias a su gran sentido del humor y a su jugabilidad frenética y original, aunque puede tornarse repetitivo pasado un tiempo.
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