Análisis de Kaku: Ancient Seal

Un fantástico intento

En este análisis me encuentro con uno de esos proyectos indie, que a simple vistan parecen algo mucho más grande, y que hasta no estar dentro de la experiencia no terminas de entender muchos de esos detalles que las superproducciones poseen, y estos juegos con tan altas pretensiones no consiguen alcanzar.

Pese a ello, no quiero que este títulos indie pase desapercibido. Y es que KAKU: Ancient Seal, el cual ha sido desarrollado por BINGOBELL, es un claro ejemplo de esto que os comento. Poniendo en la palestra, una particular aventura, con clara tendencia hacia el rol y la acción en un mundo abierto con una temática de fantasía. Que se destaca, y sufre, tanto por su narrativa como por su particular jugabilidad. Así que dejaros llevar por este texto, donde os voy a destripar esta particular experiencia.

Fecha de lanzamiento	12 JULIO 2024
Desarrolladora	BINGOBELL
Distribuidora	BINGOBELL
Plataformas	PC – XBOX ONE – PS4 – XBOX SX – PS5
Versión Analizada	PC

Quiero empezar sacando a la luz la historia y dar contexto a la premisa de KAKU: Ancient Seal. Esta se desarrolla en un mundo primordial creado por el poder elemental del Creador Saga. Donde la paz del mundo se ve perturbada por una calamidad que dispersa las almas elementales, dividiendo el mundo en cuatro continentes, y provocando la desaparición del Creador. Curiosamente, milenios después, un joven llamado Kaku y su compañero, un cerdo volador llamado Piggy, son elegidos para restaurar el equilibrio bajo la guía de una antigua profecía. Así que ya está planteada la misión de Kaku. Encontrar las almas elementales perdidas y descubrir la verdad detrás de la calamidad que asoló el mundo.

Así que iros preparando para una historia suficientemente entretenida, con interés, y con unos personajes, que aunque no hablan mucho, le terminaremos por coger algo de cariño.

Entrando en la parte de la jugabilidad. De lo primero que os quiero hablar es de la exploración y su mundo. Un juego nos presenta un particular mundo dividido en cuatro biomas distintivos: montañas nevadas, un paraíso tropical, dunas desérticas y un exuberante bosque verde junto a un volcán dormido. Cada región bien diferenciadas a nivel visual, ambiental y de peligros. Y que aportan mucha variedad a la experiencia que nos plantea el juego.

Para facilitar la navegación, el juego implementa torres de cristal que actúan como puntos de viaje rápido. Desbloquear estas torres requiere resolver rompecabezas simples, lo que añade una capa de desafío sin ser frustrante. Además, Piggy, el cerdo volador, no es solo un compañero entrañable, sino también una herramienta útil para atravesar abismos, caminar sobre el agua y teletransportarse al Reino de las Sombras para mejorar habilidades.

En KAKU: Ancient Seal, los enfrentamientos son una de las parte principales de la experiencia. Un combate bastante dinámico. Que permite al jugador desatar una buena variedad de combos y movimientos especiales. Además, en esto destaca esa concepción algo rolera, donde Kaku puede mejorar sus habilidades de combate en el Reino de los Espíritus, o desbloquear habilidades culinarias esenciales para obtener mejoras temporales antes de enfrentarse a enemigos más difíciles. Además, quiero destacar el uso del poder de Despertar para potenciar los ataques de Kaku, el cual añade ciertos matices que nos incitan a pensar como sacar partido a nuestras habilidades y potenciaciones.

Eso sí, aunque el combate es generalmente fluido y satisfactorio, puede volverse torpe cuando hay muchos enemigos en pantalla. A esto se le añade que el sistema de colisiones no va todo lo fino que debiese. Con fallos tan absurdos como que podremos quedar aturdidos ambos contendientes o bloqueos en el escenario con elementos de este.

Por otro lado, uno de los aspectos más destacados del juego son las mazmorras y las zonas de desafío. Estas áreas ponen a prueba las habilidades del jugador con plataformas complejas, trampas mortales y enemigos poderosos. Las mazmorras están diseñadas para ofrecer un reto significativo, requiriendo tanto precisión en el combate como habilidades de resolución de rompecabezas. Siendo curioso como los jefes en estas áreas pueden ser especialmente difíciles, con ataques que ocuparán y nos llevaran al limite del área de batalla, y proyectiles que obligan a los jugadores a mantenerse en constante movimiento.

Aunque el diseño del mundo es visualmente muy atractivo. Este sufre de una notable falta de interactividad que puede afectar la inmersión. Y es que los enemigos, poseen una muy absurda inteligencia. Basando su movilidad en zonas cerradas, y en correr sin sentido hacia nosotros. Haciendo que todo esto termine quitando credibilidad y sentido orgánico a una experiencia que recuerda en muchos momentos a una jugabilidad que dejamos décadas atrás.

El apartado técnico de KAKU: Ancient Seal, la verdad que impresiona bastante para ser un título de corte indie. Los gráficos, en particular, son notables. Con unos bien tratados diseños de personajes, un buen trabajo en lo que a colorido e iluminación se refiere, y una parte cinemática que impresiona bastante. A todo ello se le añade un cuidado apartado sonoro. Donde un buena ambientación, unos cuidados efectos sonoros, y un idioma abstracto, consiguen darle ritmo a la aventura y el mundo que nos rodea.

Conclusión

En definitiva, KAKU: Ancient Seal’ es un curioso y divertido juego de acción y rol de mundo abierto, que logra combinar una rica narrativa con una jugabilidad que sabe entrar con frescura. Un juego que aporta una buena ambientación de fantasía, con unas mecánicas agradables y bien implementadas, en un mundo que se agradecido a nivel estructural.

Un juego que incluye unas fuertes concepción con toques mazmorreros, un buen sistema de combate, y una notoria calidad gráfica. Que por desgracia, posee puntos oscuros como la falta de interactividad entre los elementos del mundo, zonas no todo lo inspiradas que uno esperaría, y algunos problemas menores e imprecisiones en el combate que deterioran un poco la experiencia final.

En resumen, KAKU: Ancient Seal es una propuesta muy peculiar y llena de potencial que parece que no está bajo el desarrollo indie. Un juego que sabe combinar la exploración, el combate estratégico y una bonita narrativa, que seguro que hará las delicias de los amantes de las aventuras llenas de fantasías y buenas intenciones, pese a no ser perfecta.