De la mano de la desarrolladora Unicube y con la ayuda de Team17, llega a PS4, XBOX-ONE y PC Sheltered, un juego de gestión de recursos centrado en la supervivencia de una pequeña familia en medio de un apocalipsis nuclear.
El título no tiene una historia u objetivo concreto, nuestra misión será aguantar el máximo número de días posibles recluidos en un pequeño bunker, administrando como podamos los escasos recursos que tendremos a nuestro alcance.
La principal diferencia con respecto a otros juegos de supervivencia estriba en que, no manejaremos a un único personaje, sino que tendremos a nuestro cargo a una familia entera, con lo que ello conlleva. Por ello, nada más comenzar, tendremos la posibilidad de editar a nuestros cuatro integrantes (padre, madre, 2 hijos y una mascota) tanto físicamente como en sus características (inteligencia, fuerza, descanso más rápido, menos sueño, etc.).
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ANÁLISIS |
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. VERSIÓN DISPONIBLE XBOX ONE – PS4 – PC VERSIÓN ANALIZADA PC DESARROLLADOR UNICUBE DISTRIBUIDOR TEAM17 . |
. . VALORACIÓN 6`5 |
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httpv://www.youtube.com/watch?v=jk4fpvhCmq0 |
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El bunker, tu nuevo hogar
Comenzaremos nuestra partida en un pequeño bunker, en el que por no haber, no habrá siquiera un retrete y nuestra familia comenzará a tener necesidades desde un principio. Quizás sea el comienzo la parte con más dificultad de cada partida, por la cantidad de peticiones que tendremos de cada uno, que puede llegar a ser agobiante las primeras veces. Porque imaginaros, cuatro personas, cada una con varios parámetros como sed, hambre, higiene o sueño a las que hay que atender desde el minuto 0, sin tener los recursos necesarios, en un espacio bastante pequeño, en el que casi no nos cabe ni una cama, a la par que atendemos al propio refugio, el cual habrá que ir arreglando cada poco, desde el filtro de agua exterior hasta un simple saco de dormir.
Para ayudarnos con todo esto, tendremos a nuestra disposición una mesa de trabajo, en la cual podremos craftearnos todo tipo de objetos, así como aumentar el tamaño de las instalaciones añadiendo nuevas habitaciones. A medida que mejoremos nuestra mesa, más objetos podremos fabricar, por lo que con un poco de paciencia iremos pasando del saco de dormir a una modesta cama o de un simple cubo a un retrete de verdad.
Explorando el yermo
Y ¿Cómo obtenemos los materiales y alimentos necesarios? Pues tenemos dos maneras de hacerlo. La primera es intercambiando objetos con otros individuos, tanto los que nos encontremos en nuestras excursiones, como los que se acerquen a nuestra base, haciendo trueques e intentando que no nos timen demasiado. Y la segunda y mejor opción, es realizando expediciones por el erial, buscando edificios abandonados y repletos de recursos. Esta opción la realizaremos a través de la radio, que nos ayudará a localizar nuevos sitios que explorar y por la que nos comunicaremos con los miembros que hayamos decidido mandar a la aventura. Estas travesías no nos saldrán gratis, nos constarán una cantidad de agua proporcional a la distancia que vayamos a realizar, por lo que habrá que tenerlo muy en cuenta. Además, en cada salida, deberemos llevar puesta nuestra máscara anti-radiación si no queremos volver con un pie en la tumba, además de ir equipados con algún tipo de arma por si tuviéramos que entablar pelea con algún animal o energúmeno.
Cada poco rato, los excursionistas nos irán retransmitiendo que han localizado nuevos sitios, o que han encontrado objetos, entre los que podremos elegir cual quedarnos y cual desechar. También nos avisarán si se cruzan con mercaderes, o personas que quieran unirse a nuestra pequeña familia. Si decidimos aceptarlos, deberemos tener en cuenta que cada nuevo integrante tiene un periodo de lealtad, en el cual no será 100 % manejable, por ejemplo no podremos enviarlo a inspeccionar el yermo hasta el séptimo día, o será autónomo con respecto a sus parámetros, es decir, si tiene hambre irá a la despensa aunque nosotros no queramos.
Uno de los parámetro más a tener en cuenta en Sheltered, es el estrés, que aumentará al tener hambre, sed o se llenará peligrosamente si alguno de los miembros muere. Para reducir el estrés existen numerosos objetos, o incluso una mascota viene bien para estos casos. Como veis, son muchísimos los factores a los que hay que estar pendiente en cada momento.
Y uno de los principales problemas del juego es, que si bien podemos llegar a tener controlado a nuestro grupo, hay demasiada aleatoriedad en algunos aspectos fundamentales, tales como el agua o la comida. Puedes llegar a un punto en que los integrantes de una expedición lleguen a casa, ambos te pedirán agua y una ducha, ambas opciones consumen agua, y si no tienes la suerte de que haya llovido y se hayan recargado los dispensadores, puedes verte envuelto en un aprieto en un abrir y cerrar de ojos. O por otro lado la comida, puedes haber hecho un viaje que gasta la mitad de las reservas de agua, encontrar 10 zonas nuevas pero no encontrar ni pizca de comida. Por lo que a veces te ves en un callejón sin salida, en el que realizar una tarea implicaría gastar algo que es todavía más necesario, y muchas veces te ves empujado a un final de partida, porque la lluvia no ha querido dignarse a aparecer.
Con todo esto, podremos activar una pequeña ayuda, que consiste en la automatización de nuestros personajes, y la verdad, que creemos imprescindible si el grupo aumenta, ya que es imposible estar en todo al mismo tiempo. Sí que es verdad, que no se apuran al máximo las necesidades, pero compensa el poder controlar a un grupo mayor.
En cuanto al apartado técnico del título, en este caso se ha optado por unos gráficos pixelados de bastante baja resolución. A veces, sabremos el objeto que es por pura intuición. La verdad, que para ser un juego 2D, y en el que el movimiento transcurre en la misma pantalla, se nos antoja algo escaso. Un poco más de detalle no le hubiera venido nada mal. Con respecto al apartado sonoro, cumple mínimamente su cometido, con sonidos simples y una música que no se hace repetitiva.
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NUESTRA OPINIÓN FINAL – |
| Sheltered es un buen exponente de la gestión de recursos y supervivencia, con multitud de opciones a nuestro alcance, un juego difícil que nos presenta un reto constante de mantener a toda nuestra familia a salvo.
Una pena, que parte de esa dificultad no se deba a una posible mala gestión del jugador, sino a la aleatoriedad de algunos de los parámetros más necesarios del juego. A esto hay que sumarle una calidad gráfica que podría haber dado mucho más de sí, o a momentos de estancamiento producidos por el azar, y en los que no podremos hacer lo que queremos sino lo que podamos, restándole un poco de diversión al título. Con todo, os animamos a que os sumerjáis en este yermo árido y radiactivo, que seguro gustará, o al menos no dejará indiferente a nadie, sobre todo a los apasionados del género. |
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