Regresa Kratos, y esta vez lo hace junto a su hijo Atreus en un universo mitológico que no nos tiene acostumbrado y que desde las manos de Santa Monica han intentado abrirnos los ojos y quitarnos las dudas que su hilo narrativo nos podría haber dejado, y para dar un golpe sobre la mesa con una de las producciones más espectaculares que tiene PlayStation 4. Un autentico portento en todos sus apartados que nos deja bien claro que la franquicia ha evolucionando un género que ya estaba atascado en el espacio y en el tiempo, si no que nos da con el puño en la cara con una obra adulta, dura de jugar, compleja de dominar, interesante de disfrutar, y ante todo, tremendamente gustosa de absorber.
Un nuevo God of War que os vamos a destripar con todo lujo de detalles y opiniones para con ello demostraros que cuando se mete tiempo y dinero en una producción videojueguil lo que sale de ello es una obra de arte a la altura de ser recordada eternamente en el imaginario videojugador de todo aquel que lo disfrute.