Para ser feliz quiero… un coche
La gente de Snekflat regresan al panorama indie con una nueva obra llamada Tiny Terry’s Turbo Trip para goce y disfrute de los amantes de las historias locas, los conceptos absurdos, y los universos con una creatividad sin igual.
Un juego que te llama la atención por su absurdo apartado artístico, su propuesta de mundo abierto lleno de locuras y humor, y ante todo, una narrativa y un contexto que no te deja indiferente. Por ello, no me he pedido resistir a traeros este texto para que todo aquel que no conozca este Tiny Terry’s Turbo Trip corra a hacerlo parte de su vida, ya que os aseguro que os va a marcar.
| Fecha de lanzamiento | 30 MAYO 2024 |
| Desarrolladora | snekflat |
| Distribuidora | Super Rare Originals |
| Plataformas | PC |
| Versión Analizada | PC |
¿De que va todo esto?
A nivel Contexto y trama, Tiny Terry’s Turbo Trip propone una de estas historias abstractas, sencillas y absurdas al mismo tiempo. Donde el encanto de sus personajes y su mundo, hacen de la experiencia un cúmulo de locuras que enamoran.
Todo esto nos lleva a conocer la historia de Terry. Cuando en unas veraniegas vacaciones Terry se queda solo sin sus padres y en vez de ir a la escuela de verano, se le mete en la cabeza que él lo que realmente quiere es un coche para viajar al espacio. Momento donde comienza una absurda y loca odisea donde este lo va a dar todo por conseguir su adorable sueño. Sentando las bases de una historia hecha con cariño, con mucho humor, con un guion demencial, y una estructura de mundo abierto que deja a nuestro parecer la forma de relacionarnos con la ciudad y sus gentes.
Los detalles más interesantes
Entrando ya en la propia aventura Tiny Terry’s Turbo Trip. Deciros que esta se desarrolla en la pequeña ciudad de Sprankelwater bajo la concepción de libertad de movimiento y exploración por ella. Donde un buen cúmulo de misiones, más allá de que irán ligadas al ansias por mejorar nuestro vehículo a base de chatarra para viajar al espacio. Y que nos permitirá pasar por absurdos momentos, conocer personajes divertidísimos, y plantarnos ante una variedad de misiones realmente curiosas dentro de la sencillez que rodea a todo este juego. Las cuales no quiero spoiler porque merece la pena vivir en primera persona lo bien tratadas y locas que son muchas de ellas.
Sin lugar a duda dos de los puntos más importantes, y que mejor casan del juego, son la conducción y la exploración. Por lo que respecta a la primera, supone la base principal de movilidad por la ciudad. Con un control que puede llevar cierto tiempo adaptarnos, por ser algo impreciso, pero que por otro lado tiene su gracia ya que esto supone cierto caos que aporta absurdez, atropellos, y diversión a las situaciones. Todo ello desencadenando en una exploración sobre una ciudad muy bien diseñada, llena de vida, que misiones que realizar, y objetos con los que interactuar, que terminan por crear una experiencia realmente adictiva.
Por cierto se agradece el bien gestionado mapa, su ordenado interfaz, y los indicadores justos para incitar a esa exploración pero sin demasiadas pérdidas.
Una exploración que nos acerca en primera línea a la recolección de chatarra. Una de las bases principales del juego a la hora de mejorar nuestro coche. La cual vendrá dada de manos de completar misiones, o de encontrar en nuestra exploración lugares donde esta se acumule.
Y por otro lado está el dinero. El cual encontraremos a lo largo también de nuestra exploración. Cubriendo nuestros gastos de herramientas que no serán esenciales para diferentes mejoras, disfraces, y tareas. Consiguiendo con ello darle un toque personal a la aventura.
A nivel técnico, lo primero que quiero destacar es el particular aspecto visual de Tiny Terry’s Turbo Trip. Un apartado artístico minimalista, abstracto y realmente alocado. Donde los diseños de cada personaje, los curiosos escenarios, y un precioso colorido llenan de una personalidad única a cada rincón o ser que forman parte de esta experiencia. En la parte sonora, tengo que destacar su divertida banda sonora, que se une a la buena ambientación y una sonoridad que le da ese toque original a cada acto. Por cierto, el juego llega con textos en español, cosa que se agradece muchísimo.
Lo que no me gusta
Hay cosas, que por cierto, no me han terminado de llenar. Cosas como unos controles, que como ya os he dicho, hay que darle un poco de margen para adaptarnos. Y unas misiones que en algunos casos son realmente simples e incluso absurdas. Podrían haber mejorado aún más la experiencia pese a que tampoco le hacen demasiado daño.
Conclusión
En definitiva, Tiny Terry’s Turbo Trip es uno de esos juegos que tienen un cariz y un carisma único y especial. Que sabe llevarnos de la mano de su humor, su absurdez y su estética. Una aventura muy divertida. Que te engancha de principio a fin por su cómica y súper divertida experiencia narrativa, sus curiosos personajes, y un mundo que posee una consistencia preciosa dentro de su sencillez.
Un juego de esos que te sacan la sonrisa. Que te hacen enamorarte de su absurdez y sus personajes. Y que sabe tocar la fibra sensible si profundizamos en sus bonitas intenciones. Una experiencia imposible de no recomendar y adorar, que entra a formar parte de las pequeñas joyitas indie que esperemos que no pasen desapercibidas.
