Hay juegos que sin ser grandes producciones, llaman algo la atención. Eso le pasa a Survivalist, un título desarrollado por Bob the Game Development Bot. Un muy buen debut que ha tenido esta desarrolladora y que ahora iremos diciendo cada uno de los contenidos que ofrece el juego.
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Empezamos la aventura en el papel de Joe Wheeler, un ejecutivo enchaquetado que ha ido a parar a un búnquer para evitar la infección de la pandemia zombie en la que está expuesta el mundo ficticio en el que trancurre la histori. Aparte de esto (y lo de ejecutivo nos lo hemos inventado por la cara, pero debe ser su profesión por la elegancia que presenta durante toda la aventura) la historia no es más que salir en busca de comida y demás objetos para la supervivencia, en la que interactuaremos con numerosos zimbies y algún que otro superviviente.
Survivalist toca sin explotar varios géneros. Principalmente, es un juego de Rol, en el que nuestro personaje, las armas y los objetos mejorarán con la experiencia. En cierto punto, estamos ante un mapa abierto con relativa extensión, no esperemos el sandbox abrumador pero sí un mapa con muchos sitios que recorrer. Y por último, como su propio nombre indica pero no demuestra, un juego de supervivencia. Sí, estamos ante una pandemia zombie, pero realmente, los recursos y la munición son abundantes. No es que deje obsoleto el género, pero como decims, la abundancia resta agobio y sufrimiento.
Las mecánicas que presenta Survivalis son de lo más clásica y sencillas del mundo, sin complicación, para hacer una experiencia positiva. Bob the Game Development Bot no ha querido complicarse la vida, por lo que lo único que nos exige que hagamos es derrotar a los zombies que se nos pongan por delante, con armas de juego, blancas o con nuestras propias manos, alternando si lo precisamos de personaje y, por último, recogiendo los máximos recursos posibles. Para ello tenemos una bolsa limitada en cada uno de los personajes, que son tres a la vez los que podemos manejar, e ir ayudándonos entre nosotros mismos. De los tres, solo manejaremos a uno, mientras que los otros dos son controlados por la CPU con la opción de poder asignarlos en el momento que deseemos, bien en combate o bien en una zona de calma.
El control, en cambio, cuesta quizás al principio hacerse con él, y sobre todo, dominarlo, pero en cuestión de horas no tendremos el más mínimo problema de tener el control total del juego. Una pega que sí hemos encontrado, aunque no repercute mucho por este mismo motivo que acabamos de dar, es que no podemos seleccionar personalmente apenas los controles, tenemos que adaptarnos a lo que nos ofrezcan, y como hemos dicho, no perjudica pero sería de agradecer.
Por otro lado, la inteligencia artificial de los zombies es lineal como sus cerebros. Los zombiés irán, a piñón, a por el superviviente que tenga más cerca. Nada de ir al que más vida tenga, ni quedarse pillado en medio de un matorral, ni nada. Adrenalina pura. La de nuestros compañeros de equipo, también es similar, a saco con los zombies, pero no nos ayudarán, lo que no sabemos si por falta de recursos, o por lo que queremos que así sea, por su propia salvación y supervivencia. Sea de un modo u otro, brillante para lo que estamos analizando.
La dificultad, como decíamos, no es elevada. Resulta que los objetos están en abundancia, los enemigos son fácilmente vencidos a mano (aunque tardemos más) y la munición sobra. No es un paseo, ya que con dos zimbies más de la cuenta, estamos en un verdadero apuro, y más si los que están en pantalla presentan rapidez, pero no es un juego que vaya a desquiciarnos.
La duración ofrece un buen puñado de horas y siendo rejugable, ya que al fin y al cabo, la historia es lo de menos en este juego. Irrelevante.
El apartado técnico sí que presenta flojera por parte de Bob the Game Development Bot. No vamos a castigarlo por ello, pero hay que resaltarlo. Gráficamente, el juego cumple con lo que quiere ofrecer. Una perspectiva isométrica que le viene como anillo al dedo y un apartado gráfico con detalles y claridad pero sin demasiados requisitos. Quienes vengan a pedir quemar la tarjeta gráfica de su PC o exprimir al máximo los requisitos de Xbox 360, que se olvide de jugar a Survivalis. En cambio, el apartado sonoro ya sí que es lo más flojito del juego, puesto que estamos ante un juego con una banda sonora repetitiva, y unos efectos sonoros aceptables.
Finalizando este análisis, Survivalist es un juego que ha gustado mucho. NO va a ser recordado el día de mañana, ni será un juego que recomendemos a diestro y siniestro, pero la verdad que quien tenga un par de tardes libres, y quiera jugar a un juego de este tipo, es una más que muy buena opción. Siempre y cuando, sabiendo con ante mano lo que vamos a coger. Por nuestra parte, recomendable y cuanto antes mejor, que los años no pasan en valde para nadie.
LO MEJOR
-Diversión.
-Horas de entretenimiento
LO PEOR
-Apartado sonoro
“Nuestra forma de valorar los juegos“
