Curiosidad e intranquilidad tenía con el nuevo proyecto de Hello Games, el cual tras su accidentada pero finalmente gran obra como ha sido No Man’s Sky, han terminado por demostrar que nos encontramos ante un estudio más que solvente, y con unos niveles creativos verdaderamente notorios. Por ello, el anuncio de este The Last Campfire me resultó inquietante por ver como se desenvolvía en un proyecto de menor escala y con unos conceptos base que nada tenían que ver con lo visto de ellos hasta ahora.
Y ya con el juego en el mercado, hay que reconocer que han hecho un notorio trabajo, con muy buenas intenciones, y bastante emotivo, aunque está claro que con no el mismo potencial que su anterior juego, y no teniendo nada que ver con sus inicios.
Fecha de lanzamiento: 27 AGOSTO 2020
Desarrolladora: Hello Games
Distribuidora: Hello Games
Plataformas: PC – PS4 – XBOX ONE – SWITCH
Versión Analizada: PC
Idiomas Voces/Texto: NO/ESPAÑOL
Número de jugadores: 1
NOTA: 7’5
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Y es que este The Last Campfire con el que me he encontrado, ha puesto delante mía un juego que se centra especialmente en los puzles, pero con una curiosa carga narrativa que termina por volverlo una aventura bastante emocional y con claros tintes de querer tocarnos la fibra sensiblera que todos tenemos.
Dentro ya del juego, y dejando a un lado la parte del guion, os tengo que contar que el juego nos propone un amplio mapa que explorar, con un nexo central, y en donde nos encontraremos con una serie de personajes que mirando en lo más “cálido” de su interior encontraremos su problema en forma de puzle… momento en que entramos nosotros a ello.
Puzles que me han gustado mucho, y no tanto por la complejidad que poseen, ya que se pueden realizar sin demasiados problemas y prácticamente sin atascarte, pero si siendo muy creativos y con un notable acabado y diseño, que pese a la falta de dificultad son realmente gratificantes el completarlos.
Estos puzles irán evolucionando, y siempre sorprendiendo con nuevas mecánicas, cosa que profundizará más cuando nos encontremos con que nuestro protagonista también tendrá ciertas capacidades que evolucionarán u objetos que al implementarse nos abrirán nuevas posibilidades. Eso sí, las básicas son las que normalmente conocemos de este tipo de juego, pero la originalidad en cuanto a su desarrollo supone que estas se vuelvan especiales.
El manejo y entendimiento de todas las mecánicas es bastante sencillo, además de incluir una línea de aprendizaje bastante bien llevada, y un control bien ajustado y preciso por norma general.
Por cierto, el juego no parará de introducir cosas en todo momento, y resultará que cuando estamos cogiendo el gusto, se nos acabará, ya que no dura más de cuatro horas. Cosa que para nada es malo, ya que las he disfrutado mucho, poseen la intensidad necesaria, y creo que alargarlo mucho más tampoco era necesario.
Desde el punto de vista de la historia y su narrativa, os tengo que decir que puede que sea uno de los puntos más interesante y bien llevados de todo el juego. Y es que este ha sido capaz de entrelazar una historia llena de momentos de todo tipo, donde pasamos de reírnos a la más absoluta tristeza, pero siempre intentando emocionarnos y poder empatizar con el protagonista, con el entorno, y con todas esas almas que bajo una gran tristeza se han quedado bloqueadas en un limbo que no las deja descansar en paz.
Y es que ahí es donde te emociona The Last Campfire, en ese camino que se nos ha marcado para poder ayudar a todo el que nos rodean, con sus problemas y sentimientos con los que tendremos que empatizar y conseguir que no nos afecten, y con ello resolver el puzle de su vida. Sencilla historia, llena de amor, y que os aseguro que no os va a dejar en ningún momento indiferente, excepto que no tengáis corazón.
El apartado técnico es realmente bonito, y aunque no sorprende actualmente por todos los juegos indie que aprovechan esta artística capacidad, no puedo dejar de alabar lo bonito que es, y lo bien diseñado que está todo… y que por mi parte que se siga tomando este tipo de apartados visuales hasta el final de los días.
Por otro lado, la parte sonora también concuerda perfectamente con lo que nos quieres trasmitir. Y es que ambientalmente es muy emocionante, la música encaja la mar de bien con lo que nos quiere trasmitir, y un narrador consigue no hacernos perder la atención del juego. El cual por cierto llega con textos al español, cosa que agradezco mucho por su carga narrativa.
En conclusión, hay que alabar el buen trabajo, y ante todo bonito, tanto a nivel artístico como argumental que ha conseguido Hello Games con este The Last Campfire. Y es que ha conseguido traer una historia preciosa, que marca bastante, y que seguramente a muchos retraiga a la infancia, y todo aderezado con unos interesantes puzles de entorno bastante bien integrados y elaborados.
Una bonita aventura, que siempre viene bien para dejarnos marcados y emocionados, y que, sin ser tan ambiciosa, seguramente a muchos llene más que cualquier otra súper producción.
NUESTRA FORMA DE VALORAR LOS JUEGOS
Código digital proporcionado por Hello Games
